Se están observando dos lecturas diferentes durante esta Crisis. Por una parte están aquellos que creen que esta pandemia será el fin del turismo tal y como lo conocemos, y otros que piensan que todo volverá a la “normalidad” aunque con muchos cambios a los que deberemos adaptarnos.
Yo soy de los segundos. Quizás porque intento observar los sucesos desde una perspectiva más positiva y veo oportunidades ante cualquier cambio. El hecho es que todo esto no nos dejará indiferentes y deberemos adaptarnos a los nuevos sucesos.
Una de las adaptaciones que deberá llevar a cabo nuestro sector es la de integrase en una sociedad conectada a las redes sociales y a los videojuegos. Como lees: redes sociales y videojuegos.
¡Sí! Tenemos a nuestra disposición la tecnología necesaria para construir plataformas de juegos basados en la gamificación, la realidad aumentada, el geocaching y otras técnicas que pueden acercar a nuevos usuarios al descubrimiento de nuestros destinos y productos turísticos. Y todo ello de una forma ética y sostenible.
Debemos aprender de los éxitos de proyectos como Pokémon Go o Animal Crossing. Unas obras maestras que han conseguido movilizar al mundo entero y hacerlo entrar a descubrir diversos mundos virtuales. Hemos de trasladar esta nueva forma de ocio alternativa (no sustitutiva a la real) e implementarla en nuestros objetivos de hacer descubrir al mundo, lo mejor de cada una de nuestras tierras.
¿Por que no usar esta tendencia y sumergir a los usuarios en una hibridación entre un mundo virtual y nuestro mundo real? Nos guste o no ellos van a jugar. Consigamos transformar un mero juego en un aprendizaje sobre nuestra cultura, historia y gastronomía. Adaptemos nuestro turismo a las nuevas generaciones. Es hora de comenzar a hablar en el mismo idioma que las generaciones actuales. El mundo no se adapta a nosotros, nosotros nos adaptamos al mundo.
Pero no quiero que esto quede aquí, en otro de tantos artículos que intentan motivar a nuestra industria en un cambio más que necesario. Esta vez he querido ir un paso más allá.
Hace pocos meses conocí a la Dra. Eurídice Cabañas, fundadora de Arsgames, entre otros tantos proyectos más que impresionantes en el sector del videojuego y la ética.
—Eurídice debemos hacer algo con el sector turístico—le dije durante una de nuestras largas conversaciones digitales a más de 9.000 kilómetros de distancia. Y al final la convencí. El 30 de junio ponemos en marcha un nuevo curso intensivo de 3 días, 2 horas al día, titulado Estrategias tecnolúdicas para el turismo. Y quiero que asistas.
No voy a parar de hacer lo posible, como tantos de vosotros, en dar a nuestro sector aquello que merece. Todos aquellos que somos en mayor o menor medida responsables de la formación de nuestros profesionales, debemos dejarnos la piel en los procesos de investigación y desarrollo sobre nuevos programas que aporten valor a nuestro turismo e incluso a nosotros mismos como personas. Esta es nuestra máxima responsabilidad y más aún ante un nuevo cambio de era.